Un vídeo, un mensaje y una respuesta (Laura Díez Medrano 4ºC)

Así es, imagínate que estás tranquilamente con el móvil tirada en la cama, y te llega un mensaje de alguien en respuesta a un vídeo en el que aparece un chaval diciendo lo siguiente: “Quiero pintarme las uñas, pero no me atrevo porque me da miedo que me insulten en el  instituto”. Pero a ese mismo vídeo tú le has añadido una frase que dice “quiero raparme el pelo, pero me pasa lo mismo”. Bien, supongo que estarás pensando “muy bien, te ha respondido sí, ¿y qué se supone que tengo que decir?”. La respuesta es muy fácil: ahora imagínate que el mensaje que te ha enviado esa persona dice que no es lo mismo porque él se quiere pintar las uñas, y tú solo te quieres cortar el pelo. ¿Qué harías tú? Dime.

Si he preguntado qué harías tú se debe a que sé que probablemente no harías nada por el simple hecho de que ese mensaje no te ha parecido nada raro. Pero en mi caso, sí que respondí.

El otro día, cuando me llegó ese mensaje, lo primero que dije fue: “¿Solo?” Por lo que le respondí en otro mensaje en el que decía que no comparase si obedecía a una razón u otra porque el resumen de todo es que los dos tenemos miedo a lo que nos pueda decir la gente, miedo a que nos critiquen. Yo pregunto: ¿De verdad importa si el motivo es que él se quiera pintar las uñas, o que yo me quiera rapar, o que ella o él se quieran vestir así? ¿O quizás es culpa de la sociedad que está creando inseguridades a la gente, a mí, que hace que nos dé miedo hacer lo que de verdad queremos hacer?

Si te das cuenta, realmente lo que me dio rabia de ese mensaje fue lo de “tú SOLO quieres cortarte el pelo”. Para empezar, porque si lo vemos desde ese punto vista, el pelo crece, sí, pero crece al cabo de mucho tiempo ¿verdad? En cambio las uñas tú te las pintas, y si por lo que sea te quieres borrar el color, coges quitaesmalte y ya está.

Para continuar, tan solo quiero decir que “SOLO es cortarse el pelo” o afirmar que “SOLO es pintarse las uñas”, es MUY fácil, pero creo que deberíamos ponernos en el lugar de la otra persona. Si esa persona ya de por sí tiene problemas en sus relaciones sociales, imaginaos en lo emocional y de autoestima. Aaamigaa/oo ahí ya van cambiando las cosas ¿no?. Tú no sabes lo que puede suponer para esa persona cortarse el pelo o pintarse las uñas por muy bien que le quede o por mucho que le guste. Tú no sabes hasta qué punto esa persona se siente insegura como para poder decir que SOLO es cortarse el pelo o que SOLO es pintarse las uñas.

Creo que hoy en día, en el SIGLO XXI, no deberíamos verlo desde el punto de vista de “solo es cortarse el pelo” o “solo es pintarse las uñas”, sino que deberíamos considerarlo desde el punto de vista de: ¿por qué, a estas alturas de la vida, una persona está dejando de hacer una cosa que tantas ganas tiene de hacer, por miedo a ser juzgada por la sociedad?

SOLO DIGO QUE LO PIENSES.

Laura Díez Medrano. 4ºC Curso 2020/2021.

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